domingo, 26 de julio de 2015

Forgiveness

Seguro que muchas malas palabras, insultos o burlas han llegado a tus oídos. Palabras dirigidas hacia ti que no pudiste evitar oír pero que sí podrías haber evitado escuchar. Pero no ha sido así. Las oíste y las escuchaste. Y además, las interiorizaste.

Ahí estuvo tu gran error. Creer lo que los demás decían de ti. Asimilar que aquellas cosas negativas que decían sobre ti eran más importantes que tú mismo. Que aquello que te dijeron te definía. Y no, no es así. Tú eres mucho más que un adjetivo o que un insulto.

Estoy segura de que esa persona que te insultó o te acosó ha pasado por muchas situaciones en su vida que le han hecho ser como es. Problemas familiares, inseguridades, complejos, y en muchos casos, envidia. Esa persona es una persona infeliz, muy infeliz, porque una persona con una vida plena y a gusto consigo misma ni siquiera se plantea hacer daño a los demás. Por tanto, no le hagas caso, no pagues con la misma moneda y no le odies, porque no hay mejor desprecio que no hacer aprecio y porque sentir odio o buscar venganza no es sano ni bueno para ti. Ten compasión por él o ella, porque esa persona no es capaz de ser feliz mientras tú has luchado y has conseguido serlo. 

L



No hay comentarios:

Publicar un comentario